cauto tiempo paso
el oscuro verso,
a la sombra escondida
de su autor,
cuanto tiempo las palabras
fueron olvidadas,
y como dagas envenedadas,
se clavaban una a una
en el alma,
buscando su libertad,
la rotura de la cadena
de la indiferencia.
Inundaron mente y alma,
componiendo versos
al amparo de la luna,
del frio sol del amanecer,
desafiaron la razón
y envaucaron a la locura,
hasta que por fin
recuperaron su fuerza,
su mensaje,
y el coraje para dejar
el territorio efímero de la mente,
y ser escritas en forma
de poema…